NOTA: Es evidente que yo no soy critico musical. No me pagan por ello, no voy a gratis a los conciertos, no tengo el tiempo suficiente para estar en todos lados. Para poder hacer una critica en condiciones no deberia perderme muchos conciertos por culpa del trabajo que me da de comer pero lo que si que soy es un devorador musical con cierta ansia de novelar lo que vive en los conciertos a los que existe. Aqui les dejo mis impresiones sobre el pasado Festival Primavera Club celebrado en Madrid, avisandoles, de antemano, que casi no conocia a ninguno de los grupos que tocaban y que mi cronica es patrimonio mas de las sensaciones que de la reflexion sesuda.
Primavera club 2009 Madrid
Por segundo año consecutivo, y parece que la cosa funciona, los promotores del festival de los festivales españoles(si hablamos de MUSICA) ese precioso adelanto del verano que es el Primavera Sound barcelonés programaron en las dos ciudades mas grandes de España un festival de dimensiones mas pequeñas que su hermano mayor pero como todos los pequeños de la casa no por ello exento de gracia y personalidad. El Primavera Club de este año dio un paso mas con respecto al año pasado aumentando el numero de grupos y salas donde celebrar los conciertos tanto en Barcelona como en Madrid. Un festival dificil de organizar porque se celebra a la vez en varias salas pero que cada año progresa adecuadamente lo cual no quita que pueda ser mejorable. Ese ir y venir de un lado a otro es parte de su encanto, pero sobre todo si en algo destaca este festival es por una programacion arriesgada y novedosa en formatos que no pasan de la sala de media capacidad. En todo caso el exito de publico, como minimo en la edicion madrileña, provocó algun que otro aforo completo que molestó a mas de un despistado. Para disfrutar de este festival habia que organizarse un poco y a veces renunciar a ver cosas... como la vida misma. Larga vida a la primavera en cualquier estacion.
MIERCOLES
Sin un reclamo demasiado potente para mi me dirijo a los primeros conciertos del festival para ir cogiendo ritmo de festival y de paso descubrir un lugar de Madrid que no conocia (la sala Florida Park, situada en medio del Parque del Retiro). El cartel no me llamada demasiado la atencion pero la actuacion de Devendra Banhart and the grogs, uno de los platos fuertes a priori del festival, merecia como minimo algo de atencion. Llegamos tarde y nos encontramos con el concierto de Litte Joy a medio comenzar, durante este concierto nos colocamos en un lugar demasido cercano a las barras como para hacer alguna critica sobre el sonido pero en lineas generales me dio la sensacion de que estaba siendo un concierto mas que correcto. En el descanso casi todos decidimos explorar el lugar donde se celebraba el concierto un lugar estraño tremendamente kitsch que sorpendia por su recovecos y diferentes estancias. Un lugar a tener en cuenta para proximos eventos. Para ver a Devendra nos pusimos delante de todo y ahi llegó la primera discrepancia con mi compañero de festival (GAZPACHO). A mi el sonido me parecio muy malo y me dio la sensacion que en ningun momento del concierto Devendra y su grupo lograron conectar con el publico a excepcion de los momentos en los que hablaba. En una de sus intervenciones entre cancion y cancion hizo un comentario simpatico sobre la sala donde nos encontrabamos. "Parece que estemos en el futuro, pero en polonia hace años" o algo asi. A mi compañero en cambio le gusto mucho y supo valorar lo bien que tocaban todos los miembros de la banda. A mi me parecia que no sonaban compactados, que no lograban encontrar una minima armonia entre todos los instrumentos que lograran enganchar al publico. A excepcion de algun final intenso el concierto me parecio un toston enorme. De camino a casa mi compañro y yo nos enzarzamos en una deliciosa conversacion en la que él hacia un analisis a partir de su condicion de guitarrista con capacidad para saber si alguien toca bien o mal y yo me limitaba a expresar mis sensaciones como un simple espectador que lleva muchos conciertos encima. Hubo discrepancias y alguna que otra palabra salida de tono pero cada uno supo valorar la opinion del otro. Como este es mi blog solo dire que la sala que estaba llena al comenzar el concierto se medio vació a la media hora del mismo con el concierto por la mitad. Tambien debo añadir que hubo quien siguió bailando por los tuneles del metro. Y una anecdota: El festival esta patrocinado desde este año por la marca de cervezas San Miguel (Grupo Mahou-San Miguel) antes lo patrocinaba Estrella Damm, y no se si por despiste o por que razón en el Florida Park ponian Cruzcampo (Heineken España). ¿Luchas internas? ¿Topos?
JUEVES
El jueves ya empezaban a solaparse conciertos y salas, no pude difrutar de la tarde por causas laborales pero nada mas salir del trabajo me dirigi a la Sala Nasti a ver a Cymbals Eat Guitars. Aforo completo, una pena y uno de los problemas de este festival que deberan valorar los organizadores para proximas ediciones: la convenciencia o no de programar conciertos en salas tan pequeñas como el Wurlitzer o la Nasti. Yo a pesar de haberme perdido cosas por esa causa no cambiaria el formato. Iba a dirigirme a la Wulrlitzer a ver a Ladybug Transistor pero ante el temor de que alli me pasara lo mismo y a sabiendas que podria perderme mi concierto del dia decidi ir a coger sitio a la Sala Caracol. La sala Caracol es un maravilla, un lugar creado por y para la celebracion de conciertos por lo que su sonoridad es casi perfecta, no te sientes incomodo en ningun lugar,te pongas donde te pongas y puedes ver los conciertos apoyado en la barra. De esta forma fue como disfrute del concierto acustico de Standstill. No tenia pensado verlo pero al final el cambio de planes salio bien. Esta claro que la gracia de este grupo radica en la potencia de la banda pero fue un lujazo comprobar como la simple voz de Enric Montefusco acompañada solo por dos guitarras hacian callar al publico y retumbar a las paredes. Pocos cantantes de este pais pueden permitirse algo semejante. Si bien en alguna ocasion tuvieron ciertos desajustes debido al poco tiempo que tuvieron para ensayar en ese formato. Las cervezas y susurrar "romper un silencio asi no tiene perdon" fueron las gotas que llenaron el vaso festivalero para que yo me sumergiera definitivamente el disfrute del festival. Pausa, llegan amigos, los saludo y me dispongo a coger buen sitio para el concierto del dia. A Place to Bury Stangers fueron un toberllino descontrolado desde le primer momento. Ambiente oscuro, humo que tapaba la vision del bateria y el sonido de guitarras en lucha constante con la percusion por ser los mas potentes los mas dañinos, y a la vez, placenteros. Un concierto totalmente disfrutable por tratarse de uno de esos grupos que difilcilmente conseguiran en disco provocar las sensaciones que provocan en directo. Yo en casa paso de ponerlos. Era imposible no tener los musculos en tension ante tal derroche de electricidad (algunos lo conseguian y aun no me lo explico) La cosa era dejarse llevar por el ruido melodico que envolvia a toda la sala conviertiendo a los espectaodores en parte del espectaculo. Ellos a lo suyo, distancia en lo personal y asesinos con el sonido. Un polvo de estos que no te deja fuerzas ni para echar un cigarro o comentar que tal ha ido. De vuelta a casa volvi a tener cierta discusion con musicos criticos, criticos profesionales y publico con cierta sensibilidad (aqui me incluyo). Los primeros hablaban de ciertos fallos de coordinacion durante la primera parte del concierto en la que cada componente iba por su lado, y una parte final perfectamente ejecutada. Los segundos escuchaban atentos a los demas para poder hacer sus criticas y yo tenia la sensacion de que el comienzo fue algo desordenado pero consiguio darnos una patada en el pecho que consiguio que a la mitad del concierto estuvieramos rendidos al descontrol. Al final me dejaron un poco desprotegido como si sus fuerzas ya no pudieran. Agria discusion, alguna que otra opinion demasiado vehemente...pero nada que no solucione un vino. A mi entender en un concierto de estas caracteristicas no importa tanto la ejecucion como la pasion, la energia, y la capacidad de conmover a traves del caos. Eso fue lo que dije.
VIERNES
Para mi era el dia grande, sali de currar a las cinco e iba a darme un atracon musical de cojones que esperaba que no terminara en diarrea. Sin compañia me dirigi al Circulo de Bellas Artes, epicentro del festival, lugar en donde se celebraron mas conciertos. A pesar de ciertas ventajas del lugar como su situacion centrica, su aforo, o tener un hall de entrada donde poder descansar, creo que el Circulo se llevara la mayoria de quejas de los asistentes al festival por varias razones: En primer lugar la Sala de Columnas donde se celebraron los conciertos ocupa el hipotetico cuarto piso del edificio ( realmente era el sexto) y habia que subir y bajar por las escaleras formandose escenas pateticas de jovenes jadeando como abuelas. En segundo lugar el hall se convirtió muchas veces en espacio para ver y ser visto incluso durante las actuaciones lo que resulta chocante al comprobar que habia gente fuera esperando para entrar a disfrutar y ver musica. Con la de bares que hay... Esto no esta mal cuando decides quedarte un rato y no salir para no perder tu sitio para el proximo concierto pero resulta, cuando menos estraño, que cada vez que te acercabas al hall encontraras a la misma gente, ¿vieron algun concierto? ¿serian criticos musicales? Y en tercer lugar y mas importante, el sonido de la sala en cuestion dejo mucho que desear durante todo el festival, sufriendolo más, aquellos grupos que utilizaban bases programadas o artilugios electronicos. Dependiendo del lugar donde te pusieras se oia de una forma u otra y despues de varias pruebas puedo asegurar que se escuchaba mejor a la derecha que a la izquierda del escenario. Llegue con Cass McCombs tocando su segunda cancion. No habia mucha gente y su musica tranquila y poetica no me llegó a convencer del todo, si bien fue un acompañamiento perfecto mientras daba vueltas por la sala, compraba tickets de cerveza o buscaba a algun conocido o mas bien observaba desconocidos, todo esto desde el maximo respeto y en silencio. Durante este concierto un tipo que estaba a mi lado le dio por soltar un sonoro "Toca lo que quieras" que derivó (muy a pesar del tipo, doy fé, estaba a mi lado,) en un dialogo de besugos entre el cantante y el publico al pedir, el primero, que le tradujeran lo que habia dicho el muchacho. Esa conversacion denotaba el cansancio y resaca que acumulaba el musico californiano despues de haber tocado el dia anterior en el Neu Club!. He de reseñar como ultimo apunte que durante instantes estuve enamorado de la teclista que lo acompañaba. Una breve pausa y empece a encontrar conocidos recientes con los que me coloque en primera fila para ver a mi admirado Antonio Luque entre comentarios sobre la peculiar personalidad de ese andaluz que se hace llamar Sr Chinarro. Hubo conciertos mejores, mucho mejores pero yo me quedo con este por varias razones: Chinarro dio un concierto especial en el que toco canciones de sus primeros discos, esos retazos surrealistas y densos fundamentales en una carrera que lo ha convertido, ahora mismo, en el mejor letrista en castellano de la musica española (esto es una afirmacion, que J me perdone, él lo fué). Fue mi concierto del festival porque es el que mas conozco y admiro, el que mas me gusta, y porque saliendose de la norma habitual de sus conciertos, este fue bien ejecutado por el y sus acompañantes. Un concierto en el que pudimos disfrutar de joyitas del pop Español como "Quiromantico" o "Cero en Gimnasia". Temas que ademas de gustar, penetran. Ademas de todo esto Luque se mostro simpatico y cercano, sin olvidar su habitual ironia timida y socarrona, riendose al comentar recuerdos que le venian a la mente al tocar esas canciones antiguas. A veces a Luque no se le entiende y alguno grito por el publico "Translate, please" y justo cuando comentó algo de forma clara Chinarro nos solto un: "no se si me entendeis". A mi me cae bien y nunca podre agradecerle como se merece, que en su nueva epoca, mucho mas cercana, haya compuesto "Del Monton", el tema de esta decada para el que escribe. El concierto fue especial para mi y por eso tampoco puedo entrar a trapo con una cronica analitica y profunda. Chinarro es parte de mi vida y ese concierto tambien, por las muchas cosas que conlleva, las cosas que pasaron alli y por dar las gracias dos veces.
Me fui corriendo con una sonrisa en la boca hacia la Joy Eslava. Esta sala, si no la mejor, si una de las mejores de Madrid fue desaprovechada por la organizacion del festival por razones que desconozco y posiblemente no por culpa de ellos. La Joy es una sala cojonuda de conciertos en forma de teatro en donde rara vez algo suena mal. Me dio pena no ver mas conciertos alli pero no se programaron muchos y los que sí coincidian con otras cosas. Alli podria haber dado las gracias por tercera vez pero me contenté, ya en compañia de Gazpacho, con disfrutar del concierto de Health. Corto, muy corto, asi fue el concierto de estos chicos con cara de adolescentes, si bien es cierto que tampoco tienen mucho repertorio, cuarenta y cinco minutos de concierto parece un poco tomadura de pelo. Empezaron algo desconectados, a una velocidad diferente a la del publico. Los primeros compases fueron de exageracion por parte de ellos e incredulidad en el respetable pero en cuanto se pusieron a tocar y encadenar sus dos mejores canciones aquello se convirtio en una tormenta sonora tremendamente disfrutable con un bateria en plan extraterrestre. Las chicas se recogian el pelo para enseguida volverselo a soltar para dar saltos, los chicos golpeaban el suelo emulando al bateria mientras los americanos dejaban de un lado la locura sin fundamento y se aplicaban a la hora de soltar rabia con sintetizadores, guitarras y bateria. ¿Alguien logro verle la cara al chico de pelo largo?. Lo bueno duro dos canciones pero fue muy bueno, seguramente de lo mejor del festival, volvieron a bajar el ritmo y cuando todos esperabamos otro derechazo en nuestro pecho se fueron. Casi de forma instantanea decidi bautizar este concierto como la eyaculacion precoz del primavera.
Habia otras opciones pero decidi dejarme llevar por mi instinto festivalero que me indica, gracias a la experiencia, que es bueno compaginar sonidos diferentes para no acabar saturado y volvi al Circulo para ver a Neon Indian... de nuevo las escaleras. Neon Indian fue el sorbete de limon perfecto en medio del banquete, una de las sorpresas del festival y el concierto que me saco mas sonrisas. La acumulacion de alcohol ayuda, lo se. Este proyecto del texano Alan Palomo ( se dirigió a la parroquia en un perfecto español mariachi) que en directo se hace acompañar por tres musicos mas nos ofrecieron una dosis de electronica divertida y amable que navega entre Pino d'Angio (el de "Ma quale idea") y unos Daft Punk de resaca ( a la misma hora casi todo el mundo estaba viendo a The Pastels del que dicen, no podria ser de otra manera, que fue un concierto algo pasteloso). Cumplieron con su funcion justo en el momento en que la noche ya empezaba a convertirse en madrugada. Muchos esperaban el siguiente concierto Wave Machines que al igual que sus antecesores sufrieron en sus carnes el mal sonido de la Sala de Columnas del Circulo. Los de Liverpool no tuvieron suerte, ademas del mal sonido que a ellos les afecta mas que a nadie por la solapacion de instrumentos que tienen sus canciones, tuvieron que lidiar con un publico mas que borracho que no paró de hablar durante todo el concierto. Seguramente se trataba de uno de los cabezas de cartel del Festival pero fue casi imposible intuir de que son capaces ante tal desproposito. De hecho no creo que muchos se percataran de que salieron al escenario con sus caracteristicas caretas. Hubo momentos en los que dieron muestras de ser un muy buen grupo pero no era el dia, la gente abarrotaba la sala porque habia que estar alli pero ya solo querian fiesta. Mejor sera intentar volver a verlos. A mi escuchandolos en disco me parecen un grupo mas que majo. Al terminar este concierto me di cuenta que de que todos los criticos musicales mienten si deciden prescindir del condicionante personal a la hora de hacer una cronica o critica de un concierto. Esperare a ver que dicen de este concierto algunos profesionales que vi bastante borrachos y atentos a otros menesteres. No se siente ni escucha igual en un lugar que en otro, en una hora u otra, habiendo comido o llevando diez gin tonics en el estomago. Si yo montara una revista musical la linea editorial de la misma estaria basada a partir de visceras y circunstancias. ¿Acaso es igual escuchar a Dominique A una tarde de invierno en un teatro que escucharlo en un festival despues de devorar varios conciertos y justo despues de Chemical Brothers? Yo esperaba ver a David Holmes tocando sus canciones pero me encontre que venia a pinchar asi que me rendi a los encantos y excesos de la noche y deje que me llevara en volandas mientras bailaba y compartia con el personal. Mi cuerpo ya llevaba muchos conciertos encima. Como dato curioso he de decir que de las ciento y pico personas que habia en la pinchada (por lo cual eran asistentes al festival) doce eran de Vigo. Lo cual me parece un porcentaje muy elevado.
SABADO
De nuevo el trabajo me impidió ver todos los conciertos que queria ver. Iba a ir a ver a The Pastels pero ante los comentarios negativos de los que los habian visto el dia anterior y mi manifiesto cansancio decidi acercarme a la Sala Caracol (al lado de mi casa) donde estaban unos amigos. En el ¿concierto? de ZA! no duré ni diez minutos. Sin comentarios. Pase por casa para comer algo y me fui antes de lo que pensaba al Circulo de Bellas Artes. Yo queria ver al grupo que tocaba a las 2 de la mañana pero ante el peligro de quedarme fuera fui mucho antes. Bendita prudencia. Llegué y como estaba solo me puse en una esquina, apoyado en una columna (el cansacio hacia mella) y con una cerveza. Acababa de empezar el concierto de Retribution Gospel Choir. Guitarra, bajo y bateria. En primer lugar no les hice mucho caso, no me llamaban mucho la atencion. No habia mucha gente y yo andaba mas pendiente de como apoyarme en la columna que de escuchar el concierto. Poco a poco fui notando que el publico se iba calentando al ritmo de la portentosa voz del cantante (Al dia siguiente supe que esa voz es la de Alan Sparhawk cantante de Low, si lo hubiera sabido antes no habria asistido a ese concierto de casualidad) y de la espectacular intensidad con el que el bateria, gordo y de aspecto rockero, mantenia a flote las canciones. Fui metiendome mas y mas y empece a apreciar la elegancia del bajista y de repente, en medio de una cancion, al cantante le paso algo en la guitarra (no se lo que, a veces cierro los ojos) los otros dos componentes del grupo no pararon y comenzaron a improvisar consiguiendo meterse al publico en el bolsillo, esta espera duro bastante, y cuando el guitarra volvio a escena, retomaron la cancion interrumpida sin parar de tocar. El publico enloquecio y el cantante (sabe dios que se habria metido) entro en un estado de extasis que contagio a sus compañeros y a todos los que alli estabamos. La cancion se convirtio en epica, musica en directo en estado puro, comunion total entre todos los actores de la escena: protagonistas (banda) y secundarios (publico). La cancion crecio y crecio y Alan Sparhawk se alio con los dioses para ofrecernos el momento mas excelso de todo el festival cuando guitarra a los brazos se puso a tocarla con la boca. Despues de ese momento algido el concierto no decayo y al terminar la gente se volvio loca aplaudiendo con lo brazos en alto y mirando a su alrededor con la satisfaccion de haber presenciado uno de los momentos del festival. Fue tal el agradecimiento del publico en forma del aplausos y gritos que la banda volvio a salir a tocar un ultimo tema desnudos de cintura para arriba (tampoco era necesario). Memorable. Las fuerzas empezaban a flaquear pero una muy buena sesion de continuidad a cargo de Psychocandy nos mantuvo a flote durante una hora. Cuando School Of Seven Bells subieron al escenario mas de la mitad de los que llenabamos la sala de columnas estababamos agotados. En todo caso y a pesar del cansacio y a que el sonido no era demasiado nitido disfrute de un concierto majo de un grupo que ultimamente pongo mucho en casa. Es curioso que los mejores conciertos del festival sean de grupos que en casa no escucho y viceversa. Muchos nos entretuvimos mirando a las guapas gemelas de origen latino que forman parte de este grupo, sobre todo a la cantante, muy guapa ella , que cada vez que decia una frase le daba un tic algo estraño que le hacia mover la cabeza de forma poco elegante, (¿o eso es chic?). Debo decir que se agradecieron las proyecciones que acompañaron el concierto dandole un toque de importancia a un grupo que me recordo demasiado a Bat For Lashes, es mas, ya me los imagino este año tocando en el Primavera Sound a las siete de la tarde. Su disco en todo caso es muy disfrutable y durante el concierto yo no pare de bailar, porque que me gustaba y tambien para no caer dormido.
DOMINGO
El domingo el Festival se despedia con una velada en la Sala Caracol. A los primeros los vi de reojo, no me llamaron la atencion, y me fui a cenar. Volvi pronto, despues de tomar el peor y mas grande pincho de tortilla de mi vida, para ver a Jeffrey Lewis & The Junkyard. Fue un concierto de curioso de un grupo que me habian dicho que hacia folk. Si bien es cierto que tienen canciones cercanas a ese estilo su musica era tambien heredera de sonidos indies americanos de los noventa, incluso, a veces, me recordaron un poco a Hefner. Fue un concierto muy majo, mejorable en su ejecucion, y que fue aderezado con proyecciones y narracion de comics del mismo Jeffrey. En una de ellas nos contó una personal historia sobre el comunismo que sacó una carcajada a mas de uno. En otra ocasion ocupar medio concierto enseñando banda diseñada me pareceria mal pero en este caso no desentonó y quedo bien como añadido a las canciones. A lo mejor que ultimamente el comic este llamando a mi puerta tambien tiene algo que ver. A mi me gustaron con el añadido de parecer tipos simpaticos y sobre todo porque terminaron con una version de "Tom Courtenay" de Yo la Tengo que me alegró el dia. Casualidades de la vida, llevaba puesta mi camiseta del susodicho grupo. Gazpacho, mi compañero eventual de fatigas festivales, me solto.
-Joe! que rapido te diste cuenta de que era esa cancion...
-Yo la Tengo tio, yo la tengo.
Por ultimo volvi a ver a Retribution Gospel Choir, grupo encargado de cerrar el festival. Ya los habia visto, iba a irme para casa pero ante la posibilidad de que pasara algo parecido a lo del dia anterior decidi quedarme. La gente que no habia asistido al otro concierto estaba ansiosa por verlos pero se llevaron una decepcion porque esta vez estuvieron simplemente correctos, victimas, de forma mas que apreciable, del cansancio y sabe dios que mas. Es mas, el concierto tuvo que terminar antes de lo previsto porque, esta vez, al bateria se le rompio el pedal.
Y la primavera en medio del invierno terminó, y como siempre me traje para casa un par de flores y esta vez tambien unas viñetas. Mencion especial a los muy majos camareros del Circulo de Bellas Artes. Uno de ellos me invito a una cerveza el sabado (lo que le sirvio para recibir una reprimenda del encargado) en agradecimiento por haberle alegrado el dia anterior. Lo unico que hice, como camarero que he sido, fue hacerles el trabajo mas facil a pesar de mi borrachera. El alcohol no es excusa para perder las formas, la elegancia y la educacion. Por ultimo una queja: no estaria de mas unificar los precios de las bebidas en todas las salas. En todo pequeños desajustes en un festival precioso que se agradece y es necesario.
En Mayo nos esperan en el Primavera Sound de Barcelona Pixies, Pavement, Th xx, The Antlers.... pero para eso aun queda.....
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PD: No he encontrado mas videos de los conciertos que mereciera la pena colgar aqui
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lunes, 14 de diciembre de 2009
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