Todo empezó al salir de trabajar. La noche anterior habia sentido sensaciones nuevas, dolorosas, contradictorias y habia sentido miedo, solo en mi habitacion, despues de conocer la noticia de que una persona que se portó muy bien conmigo habia fallecido en acidente de trafico. Casi sin querer segui a mis compañeros de trabajo a un bar donde tomarse unas cañas despues del dia de trabajo. Ultimamente prefiero irme a casa y no gastar, ultimamente no me satisface salir, beber por beber, convertir mi ser social en un esclavo del divertimento pero ayer no queria estar solo, no queria llegar a casa y recibir la visita de imagenes confusas de muerte y rabia.
Necesitaba hablar de ello pero todo lo que decia era muy por encima, no queria contar que la persona que me acogio en Roma se habia matado, queria contar lo que mi cabeza habia generado la noche anterior, queria expresar y compartir mi confusion. Sin mas, la muerte se apareció una noche en mi casa mostrandose de forma tangible y en forma de amenaza. No era capaz de quitarme la imagen de la buena de mi amiga convertida en simbolo de mi propia muerte, me sentia muy fragil al comprobar de cerca que la muerte no llama antes de entrar. Me entro panico al pensar en que pasará en mi cabeza cuando el que muera sea alguien aun mas cercano. Aquella chica fue muy buena conmigo pero la vi dos veces en mi vida y su muerte me creo una profunda pena de forma mas antropologica que personal y a la vez, mi agradecimiento por el cariño mutuo que habia surgido hizo que me sintiera solo, desprotegido. Y entonces, cuando llebaba dos cervezas y ya le habia contado a todo el mundo lo que habia pasado llego Antonio y pude hablar de la muerte, pude emocionarme mesuradamente y con una sonrisa recordando mi viaje en moto con ella por Roma y tuve a quien decirle que no dejaba de pensar en como pudo ser el accidente.
Al rato supe que la muerte paso cerca de mi pero aun no me ha tocado y que el desgraciado final de la pequeña partisana me ha dolido, me ha dado mucha pena, me ha provocado confusion, ira y rencor pero por razones obvias no me ha golpeado. Puede sonar insensible pero creo que las emociones despues de dejar que se expresen con libertad hay que saber educarlas y entrenarlas para que nunca resten,para que siempre sumen, sean del color que sean. La exageracion por muy bonita y real que resulte, siempre resta.
Con Antonio, y un par de amigos mas, cené en un bar en el que estabamos casi solos, eran las once de la noche de un lunes, el de ayer, no demasiado amable climatologicamente. Hablar, compartir y beber me sento muy bien, comence a colocar todas las sensaciones del dia anterior en el lugar que se merecen sin sobreactuaciones innecesarias en alguien que ya no reniega de su sensibilidad y en honor a esa pequeña italiana que ya no está, comence a disfrutar de estar a gusto. Empece a disfrutar tanto, de la compañia y de la charla, me deje llevar tanto por la vida que no cai en mi habitual error de hacerle preguntas. Simplemente iban pasando cosas. Nos apetecio aprovechar que teniamos copas gratis en un local y nos acercamos a tomar "la ultima". Eran las dos y ya solo cuatro personas aguantabamos el convite.
En el bar pedimos deliciosos cocteles, no habia mucha gente y de nuevo senti la seduccion de la noche como espacio donde engrandecer los pecados y aliviar el alma, como espacio donde intentar entender mejor el mundo a sabiendas de que en la noche no reside lo realmente importante de esta vida. Bebiendo cocteles me rei como hacia tiempo que no reia, me senti libre, vivo, me senti bien. Volvi a sentir la sensacion tonta de sentirte borracho sin creerte culpable de algo. Ayer, yo no sali de noche, entre en la noche porque me salió.
La compañia de Antonio fue fundamental en todo esto. Antonio con su mirada iluminada, esa que solo tienen los que creen que vivir es la puta ostia y que vivir no solo es lo que gusta o lo que quieres, si no tambien lo que hace dudar y lo que duele, lo que vas aprendiendo y lo que no entiendes, con su hablar entrecortado, ese que solo tienen los que, al no esconder sus errores, son capaces de decir verdades absolutas, dijo algo que parece banal pero dice todo de él y de la gente que realmente me gusta:
-A mi... a mi, es que me gusta reir (dijo mirando hacia abajo, como pidiendo perdon mientras se reia, estoy convencido que de él)
Algun dia escribi que los inteligentes hacen preguntas o buscan respuestas. Los primeros son unos manipuladores y los segundos unos amargados, en cambio los sabios se rien, se rien al comprobar que el ser humano no puede llegar a todas partes ni puede entenderlo todo, se rien porque su cabeza ordenada nunca llegara a someter a su cuerpo sensible. Antonio es un tipo sabio. Un tipo vivo que vive con amor propio y que cada dia sigue aprendiendo que perder es necesario para poder vencer.
Decidimos buscar otro sitio, sin mas, sin comentarios sobre la hora ni sobre lo que tendriamos que hacer cada uno al dia siguiente y unos chicos nos aconsejaron un local que seria menos de ambiente que al que iban ellos. De camino nos cruzamos con un Angel. Y cuando entramos en el bar en cuestion mientras Antonio y yo reiamos al recordar exitos discotequeros de los noventa el Angel nos esperaba al fondo, cerca de los baños, en el unico lugar donde habia un hueco libre para cuatro personas. Ese Angel tenia vida y la mirada de Antonio y la mia no dejaron de captar cada movimiento, gesto y percepcion que nos ofrecia. Era un Angel cinematografico mucho mas disfrutable en la cercania. Con sumo respeto hacia quien transmite tal cantidad de elegancia seguimos mirando seguimos buscandola entre la gente para quedarnos con un cachito de sus sonrisas, sus gestos, sin que se diera cuenta, sin molestarla, como espectadores de un cuerpo ajeno, deleitandonos con la contemplacion de la mayor obra de arte que existe en este mundo. Durante un pequeño instante baile con ese Angel y fue perfecto, fue precioso.
Aquel Angel iba a acompañado de belleza. Belleza en forma de hombres maduros con gestos ansiosos por lograr conseguir besos, belleza en forma de bailes arritmicos de mujeres maduras con la mirada perdida, belleza en forma de conversaciones y sonrisas cruzadas entre gente desconocida y sobre todo belleza en forma de pequeña mujer de sonrisa dulce y amable, de mirada introvertida y abierta. Al encontrarla deje de mirar al precioso Angel luminoso y empece a disfrutar de la belleza medio escondida de esa mujer. Y digo mujer porque ayer no vi a una chica que me gustara vi a una mujer bella a la que no le faltaba ni sobraba nada. En las mujeres a diferencia de las chicas la ropa nunca sobra, la ropa (en este caso un precioso vestido) es como las manos en los ojos de un pequeño que observa una escena de sexo en una pelicula. Quitarle un vestido a una mujer nunca sera un acto sin importancia, podra ser violento o dulce, fugaz o pausado pero necesariamente debe ser disfrutado. Su belleza me trasmitió un respeto y una admiracion que hacia tiempo que no sentia. No sabria explicar cual es la diferencia, pero cada vez, me doy mas cuenta de que me gustan las chicas pero solo podre enamorarme de las mujeres. Seguramente solo ellas sepan la diferencia, noten en que momento dejan de ser un cuerpo o una chica maja e inteligente para convertirse en una aventura que descubrir, una aventura en la que la seduccion no es un juego para ganar sino para compartir.
Me gusto tanto esa belleza que percibí, que no quise mas, no quise estropearlo no quise acercarme y decirle cualquier chorrada que estropeara lo instintivo que sentia todo. Si le hubiera dicho algo el instinto se convertiria en un obstaculo para mi mente y mi mente querria dominar mi instinto. Me conformé con rozarla de vez en cuando, soltar alguna mirada mas pícara y decirle que iba a escribir esto, que iba a escribir esto con la intencion de volver a verla, de volver a ver belleza. Las chicas guapas siempre te gustan para conquistarlas, la belleza gusta para disfrutarla. Las guapas contestan si o no, la belleza te escribe una novela....
Y fui a trabajar sin dormir, hacia mucho tiempo que no lo hacia y ha sido la primera vez que no me molestó ni me fustigue porque en ningun momento de esta mañana, como he pensado tantas otras veces, senti que hubiera hecho algo mal. Poco a poco me convierto en un hombre y ya tengo ganas. Siempre he querido convertirme en un hombre que sepa amar a las mujeres y se deje amar por ellas... Los chicos queremos ser perfectos, los hombres saben que no lo son.
p.d : La belleza no existe si es eterna, si no envejece, si no muere.... Mi pequeña partisana tambien era bella...
.
.
.
martes, 31 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
a- no se te ocurrirá pensar?
ResponderEliminaro- no, no. sólo tengo cosas en la cabeza.
a- deberías airearlas de vez en cuando.
o- debería. quizás huelan un poco mal.
a- a huevo podrido con roquefort?
o- no, a rosas con nocilla.
Hola Alfonso:
ResponderEliminarLa chica del vestido te ha leído, y mucho más.
Espero que no te importe pero ha buceado en tu blog y le han cautivado tus serenidades y tus tempestades de lava y de nieve.
Gracias (a ti y a su vestido) por acercarte a ella y dejarle la puerta abierta para que, libremente, te descubriera en esta tarde de martes.
Muchas gracias escritor jovencito.
Nuria
PD: nunca he comentado nada en un blog, así que no sé si lograré colgar esto para que lo veas...