SOLDADO DE OJALA,TA!! (la batalla de la circunstancia)

Todos vivimos en una guerra (Viva la guerra cantan Standstill). Cada uno con su batalla, cada uno en su puesto, pero siempre en la guerra. En esta guerra en la que sabes que aunque acabes venciendo nada te salvara de morir. A mi me ha tocado ser soldado: Soldado de Ojala,Ta! No se muy bien a que compañia pertenezco ni quienes son mis mandos pero, si estoy hecho de ojalata, es porque debo protegerme muy bien.

Sin saber porque, siempre acabo adentrandome en bando enemigo, sin querer, desorientado mientras busco mi campo base, que por otro lado, nunca he visto ni pisado. Ante la ausencia de directrices a seguir mi sentimiento patriotico me incita a explorar las zonas enemigas en busca de informacion. Muchas veces he llegado a fingir ser uno de ellas, para saber mas, para conocer sus estrategias y planes. No me resulta demasiado dificil pasar inadvertido, al fin y al cabo, en una guerra, los dos bandos se parecen mas de lo que creen, de otra manera no tendria sentido que lucharan por conseguir lo mismo.

Llevo ya un tiempo destinado en la batalla de la circunstancia. Despues de salir victorioso de las batallas del desarraigo y la responsabilidad, ahora me toca esta. Sin querer, uno, a base de no encogerse y alistarse siempre de voluntario ha adquirido cierta experiencia y conocimiento de la guerra. El tiempo pasa muy rapido cuando estas en guerra y un dia, sin mas, dejas de pensar en lo bien que estabas antes de que todo estallara, dejas de pensar que la comida para el regimiento es una mierda y poco a poco te acostumbras al frio. Todo esto me esta permitiendo "disfrutar" de esta batalla de forma diferente. Ya no me guío con el objetivo de ganar la guerra, ahora mis esfuerzos se centran en acabar las batallas. De tanto infiltrarme en campo enemigo he comprendido que la guerra solo tiene sentido para deshacerse de la necesidad de ganarla. De la guerra no puedes huir, en la guerra no puedes objetar. La guerra existira y estara siempre, es necesaria, es natural, es inherente al ser humano pero se puede luchar de forma diferente, utilizando tijeras que corten en lugar de espadas que claven, utilizando mecheros que quemen en lugar de pistolas que hieran o saliendo al campo de batalla sin mapas ni emboscadas definidas de antemano. La guerra seguira produciendo dolor y muerte pero conseguiremos ganar tiempo para que, los que piensan, firmen la paz, dejen de tener trato comercial o decidan unir sus fuerzas para afrontar una nueva guerra. Ganaremos tiempo para finiquitarla, para convertirla en materia que estudiar en las clases de historia.

La batalla de la circunstancia comenzo mientras yo aun andaba perdido por el Retiro, meses despues de terminar la batalla que se produjo alli. Una batalla en la que nunca vi a nadie mas que a mi, excepto cuando se me aparecian espejismos por causa del agotamiento o la falta de alimento en mi estomago y en mi sangre. Muchas veces llegue a disparar a esas visiones. Cuando fui rescatado por un paisano del lugar llamado Valentin Barreira, el me conto que deberia ir rapidamente al nuevo objetivo: La batalla de la circunstancia habia comenzado. No tuve que andar demasiado para llegar a la zona cero. Cuando ganas una batalla solo tienes que dar dos pasos para encontrarte con otra y asi, poco a poco, conquistar un imperio. En la batalla de la circunstancia los bandos estan muy dispersos y desagrupados, pocas veces encuentro contrincante pero cada vez que eso sucede la lucha es cuerpo a cuerpo, es dura, es larga. Ahora mismo estoy enfrascado de lleno en una pelea con un general enemigo al que respondo con sonrisas cuando el me ataca con sus medallas oxidadas...

En esta batalla en la que estoy immerso me encuentro con muchos civiles del bando contrario, ellos no luchan pero no por eso dejan de ser del otro bando. Me he encontrado con varias que me han picado, que han sacado a relucir toda su seduccion para excitarme, a sabiendas que yo no agredo a nadie desarmado, ni ellas tendrian con que defenderse. Esa actitud la veo normal, la veo logica. Aunque muchas veces pierda fuerzas imnecesarias, aunque a veces me saque de quicio su actitud burlesca y encantadora entiendo que todos acabamos insultando al arbitro cuando vamos al futbol.... Cuando esto pasa me ascienden: de soldado, acabo segundo. A veces las ganas de hacerle sangrar son proporcionales a las ganas de curarle despues para que siga sin ser parte de la guerra o yo deje de ser soldado para convertirme en campesino.

La ultima contrincante desarmada llevaba un casco rodeado de mar muy parecido al mio, un casco que le habia permitido seguir con su dia a dia sin que la guerra le afectara, siguiendo a su ritmo, con calma, preocupandose unicamente de que su huerta de buenos frutos sin prestar la minima atencion al sonido de los bombardeos. Que llevara casco provoco que me entraran unas ganas terribles de acribillarla sin compasion y con pasion hasta el punto de no importarme morirme con ella en el intento. Cuando encontró un mechero en su bolso y me miro con cara de inocencia me di cuenta de que su guerra era otra, era otra....

Siempre me quedara una sensacion de vacio cuando me alejo de estos personajes, me quedo solo, me quedo sin contrincante y a la vez me queda la duda de que realmente sean civiles o por contra se traten de soldados camuflados en dias de tranquilidad y comodidad sentimental, si fuera este el caso no me perdonaria no haber aumentado el numero de bajas contrarias. Cuando batallo de verdad grabo videos en mi memoria, videos que perduran y se pueden montar. Cuando me quedo con las ganas saco fotos que guardo en lugares donde, algun dia, de sorpresa, quien sabe si volver a mirar. Al fin y al cabo esta es la batalla de la circunstancia...


P.D : A veces te encuentras cosas que te gustan tanto con tan poco que que no paras de querer mas a pesar de que sabes que no puedes saber nada mas, no te quieren dar mas. Esto puede provocar mas de una inteferencia entre ella y tu, tu y ella, tu y tu, tu y la circunstancia, tu y el tiempo, tu y la oportunidad, tu y la belleza, tu y la verdad. En todo caso es un placer compartir con pequeños duendecillos que aparecen de la nada y te hacen sentir que alguien como ellas, con la sonrisa zurda y el caminar ambidiestro, puede que esté como tu... Perdida en la puta Guerra....

VIVA LA GUERRA!!!
y los tratados de paz (aunque aun no hayamos asistido a ninguno)



CONTINUARA.....





.




.





.





.