miércoles, 19 de noviembre de 2008

BENVIDO IAGO!!!

  Todos mis sobrinos son hijos del otoño. Aitor llegó un 11 de octubre de 1990. Elena, mi hermana mayor, lo tuvo en Santiago y yo tenía apenas 7 años, ni siquiera tenía uso de razón para darme cuenta de que era tío. Es más, Aitor más que un sobrino siempre ha sido como un hermano pequeño, sobre todo cuando vivía con nosotros y lo llevaba conmigo al colegio. Aitor no lo ha tenido fácil y es una alegría ver como poco a poco se convierte en un hombre, a pesar de que he pasado, paso menos tiempo con él del que me gustaría...

El 9 de octubre de 2003 al mediodía me llamo mi madre. Por entonces vivía en Ourense y estaba haciendo las practicas de fotografo de prensa en La Voz De Galicia. Me comentaba que acababa de nacer Nerea la primera hija de Cris, mi segunda hermana. Esa vez sí que sentí la emoción, esa vez fui consciente de que era tío.

Es curioso, la segunda hija de Cris es mi ahijada, pero no recuerdo muy bien como supe que había nacido, es más, siempre dudo si nació el 16 o el 17 de noviembre de 2005. Creo que en aquella fecha andaba de viaje, no lo recuerdo bien. A Sofia la cuidé durante muchas mañanas mientras sus padres trabajaban y sus abuelos tenían cosas que hacer. Durante aquellas mañanas creamos un precioso vínculo que estoy convencido nunca olvidaremos a pesar de la distancia que me separa ahora mismo de ella y lo pequeña que era ella cuando pasó. En todo caso, sé que en algún lugar de su subconsciente estarán guardadas mis palabras de perdón la primera vez que tuve que cambiarle los pañales o mis insistentes: "Di Tio Fon".

Esta madrugada ha llegado IAGO. Es el tercer hijo y primer varón de mi hermana Cris. Como siempre, no estoy cerca en el momento en que esa pequeña cosa emprende su viaje por estos lares. Es mi cuarto sobrino y creo que aunque fuera el vigésimo me haría la misma ilusión. A Iago espero conocerlo estas navidades y decirle al oído que tiene un tío un poco loco que anda por ahí intentando convertirse en un buen hombre, le dire que no tiene de que preocuparse porque tiene una familia maravillosa, le contaré que en nuestra familia las mujeres son mayoría y debemos aprender a quererlas. Le contaré como son sus abuelos como padres, le diré, sin que su madre se entere, que todos sabíamos qué ella tenía que ser madre. Le daré consejos de como soportar ser el niño pequeño teniendo hermanas mayores. En los pocos ratos que este con él, lo sacaré a ver el sol, le dejaré mancharse de barro y cuando vaya a coger una ortiga con la mano iré a buscar menta... Pequeño Iago, pequeño nuevo vigués, pequeño nuevo penabade: benvido!!!!

Al llamar a mi hemana para felicitarle me ha comentado que al pequeño Iago le costo salir, se enredó en su cordón umbilical y salió a este mundo azul como un pitufo. Mi pequeño sobrino quiso suicidarse nada más salir a este mundo!!!! Es lógico, seguro que durante estos 9 meses en la barriga de mi hermana no paró de escuchar ruido, enfados, tristeza y la palabra "crisis" (esta más de lo debido ante la similitud entre esa palabra y el nombre de su madre) el pobre se acojonó y le entro pánico. En cuanto salga a la luz y vea el sol comprobará que los hombres no saben valoran lo que tienen y por eso se quejan. Como a casi todos, su ignorancia le hizo creer que esto no merecía la pena. Tendré que enseñarle que cuanto más se aprende, cuanto más se conoce este mundo y la condición humana y sus miserias, mas ganas se tiene de vivir. A él le perdono que quisiera suicidase por desconocimiento a los que lo hacen victimas de inconformismo y cobardía no. Pequeño Iago naciste dos veces! te espera una vida preciosa, te lo promete tu tío Fon y si te entran dudas te contaré toda la mierda que he visto y como una simple sonrisa puede hacer que toda esa mierda pierda importancia. Eres mi sobrino no te queda otra que vivir con escepticismo y entusiasmo!!!!!

Esta bien ser tío, ser padre me queda ahora mismo muy lejos, no por edad si no por circunstancia, sabe dios si lo seré... Mientras tanto cuidaré en la medida de lo posible, desde la lejanía, de esos pequeñuelos hijos de mis hermanas. Es increíble comprobar como cosas tan pequeñas son capaces de recordarte, como se alegran al volver a verte. Es emocionante escuchar la felicidad con la que dicen ¡Tio Fon! cuando me ven, y es muy gratificante sentir el compromiso de cuidarlos si les pasa algo... Quien sabe, a lo mejor el próximo Penabade nace a partir de mí....me da que mi querida hermana Alex, la tercera en discordia, no está muy por la labor....

1 comentario:

  1. :)CUANTA TERNURA EN LO QUE ESCRIBES,DOBLEMENTE FELICIDADES POR LO BIEN Q LO HAS EXPRESADO Y POR ESA PERSONITA A LA Q TENDRAS Q ENSEÑAR POR CUARTA VEZ A DECIR TIO FON!!

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